El fomento y desarrollo sostenible de actividades ecoturísticas en la región, pretende proteger y salvaguardar los ecosistemas estratégicos a través de la implementación de campañas de educación ambiental con la comunidad.
Esta iniciativa nace del cumplimiento del artículo 173 de la Ley 1753, que limita las actividades productivas agropecuarias en los páramos, esto implica que los habitantes migren a nuevas actividades económicas que contrarresten los impactos ambientales en el territorio. Por esa razón, Corpochivor, le apostó al desarrollo del ecoturismo como una oportunidad para sensibilizar a la comunidad permitiendo generar ingresos a los campesinos que habitan los páramos. Igualmente, se busca dar cumplimiento a los Planes de Manejo Ambiental, dirigidos a la preservación restauración y uso sostenible de nuestros ecosistemas.
Como iniciativa piloto de ecoturismo en el suroriente de Boyacá, la Corporación gestionó ante el Fondo de Compensación Ambiental (FCA), más de 600 millones de pesos con el fin de establecer senderos ecoturísticos en los páramos de Rabanal, Cristales, Castillejo, Mamapacha y Bijagual que abarcan los municipios de Garagoa, Ciénega, Pachavita, Úmbita y Ventaquemada, como iniciativa de conservación ecosistémica en el departamento. Con estas actividades la comunidad tendrá el privilegio de realizar avistamiento de fauna y flora, senderismo, turismo aventura, festivales regionales gastronómicos y religiosos.
El desarrollo de esta actividad ecoturística no genera afectaciones en los ecosistemas, debido a que se realizará una selección de las zonas aptas para establecer la capacidad de carga de cada sendero, de esta manera, se determina el número promedio de turistas que pueden visitar el destino sin producir daños en el entorno. Además, es importante aclarar que cada complejo tiene restricciones diferentes de acuerdo a sus características, disponiendo que los senderos se pueden establecer en zonas y sub zonas de uso sostenible, en sectores para el desarrollo y también en áreas de preservación y restauración.
Como aspectos importantes se encuentran los estudios de longitud y recorrido, ubicación, accesibilidad, duración del trayecto, temporadas de cierre y apertura de cada sendero. Sin embargo, dentro de la planeación física para la implementación de los senderos interpretativos, se dispondrán de puntos ecológicos para la recolección y separación de los residuos generados. Estas acciones estarán reforzadas con actividades de sensibilización a los visitantes frente a la disposición de los residuos en sitios autorizados. Se propenderá, que los envases y demás elementos que se provean a los visitantes sean biodegradables.
Estos proyectos ecoturísticos buscan que los ecosistemas que van a ser intervenidos se conserven de manera adecuada, dando un uso sostenible (de acuerdo a su zonificación). Además, se pretende realizar una reconversión productiva gradual que promueva prácticas amigables y participativas impulsando un modelo ejemplarizante en la comunidad a través de valores de gobernanza territorial.
El ecoturismo está proyectado como un negocio sustentable, donde las comunidades estarán capacitadas en temas turísticos y empresariales basados en el uso racional de los recursos naturales, brindando herramientas que permitan proteger de manera responsable los ecosistemas del territorio.